El Índice de Confianza del Empresario del Comercio (Icec), elaborado por la Confederación Nacional del Comercio (CNC), se mantuvo sin cambios significativos en abril en comparación con marzo, situándose en un nivel de 101,7 puntos después de ajustar por factores estacionales. Sin embargo, este resultado representa una caída notable cuando se compara con abril del año anterior, con una reducción del 8,2%, principalmente debido al bajo optimismo que existe respecto a las condiciones actuales de la economía. Este es un subíndice dentro del Icec que mostró una disminución de 24,8 puntos en la variación anual.
Aunque algunos componentes del índice experimentaron leves aumentos mensuales, como las Condiciones Actuales Generales que crecieron un 0,8% y las Intenciones de Inversión que aumentaron apenas un 0,1%, estos incrementos no fueron suficientes para contrarrestar la cautela que persiste entre los empresarios debido al contexto económico actual.
El presidente del Sistema CNC-Sesc-Senac, José Roberto Tadros, comentó que los avances puntuales en ciertos indicadores no logran compensar las pérdidas acumuladas, especialmente en el sector de bienes duraderos, que es más sensible al alza en las tasas de interés. Este segmento ha enfrentado mayores dificultades, lo que se refleja en una reducción de inversiones y una actitud más conservadora en cuanto a la expansión de sus negocios. Según Tadros, la situación actual subraya la necesidad de implementar medidas que incentiven el consumo y ayuden a disminuir las incertidumbres que afectan al sector.
A pesar de las ligeras subidas mensuales, las intenciones de inversión sufrieron una caída del 2,4% en comparación con el año anterior. Por otro lado, la proyección para la contratación de empleados también disminuyó en un 2,4%, mientras que las inversiones en inventarios bajaron un 1,1% al comparar con abril del año pasado.
El estudio también reveló que las expectativas para los meses venideros se redujeron tanto en el último mes, con una baja del 0,5%, como en el último año, con un descenso del 8,9%. A pesar de esta caída, el nivel de confianza para el futuro inmediato sigue siendo relativamente optimista, situándose en 128,4 puntos. Esta evaluación indica que los empresarios están mostrando una mayor preocupación por la situación presente que por el futuro cercano.
João Marcelo Costa, economista de la CNC, explicó que el encarecimiento del crédito y la pérdida de dinamismo en el mercado laboral afectan directamente la disposición del comercio minorista para expandirse. Esto se debe a que el sector comercial reacciona rápidamente a las condiciones que pueden impactar negativamente los negocios a mediano plazo, mostrando un ajuste rápido en el corto plazo.
El descenso en el optimismo fue especialmente pronunciado entre los empresarios que operan en el comercio de bienes duraderos, como electrónica, muebles, electrodomésticos y vehículos. Este sector registró la mayor caída anual en el índice general, con un 10,2%, y fue el que más contribuyó a la reducción del sentimiento sobre las condiciones actuales, que bajó un 14,8%.
Incluso sectores que tradicionalmente son menos afectados por la estacionalidad, como supermercados, farmacias y tiendas de cosméticos, también experimentaron retrocesos, operando ahora en un nivel que el Icec considera pesimista, con 97,8 puntos.